En su hogar

• Cuide su sonda de la manera que se le mostró en el hospital. Usted tendrá que lavar los tubos por lo menos dos veces al día.

• No se alarme por la presencia de sangre color café o rojiza, ni por la presencia de coágulos de sangre en su orina. Esto se debe al procedimiento. Sin embargo, llame al proveedor de atención médica si la sangre no comienza a desaparecer en 72 horas desde que regrese a casa.

• Beba abundantes cantidad de líquido durante el día (lo suficiente para mantener la orina de color muy claro). Esto ayudará a que tenga un buen flujo de orina.

• Evite conducir un automóvil hasta que el proveedor de atención médica se lo permita. 

• No vuelva al trabajo hasta que el proveedor lo autorice.

• No levante objetos pesados durante 3 semanas después del procedimiento.

  • No levante nada que pese más de 8 libras (aprox. 3,5 kg).

  • No levante pesas.

  • No cargue niños ni bebés.

• No corte el césped ni pase la aspiradora.

• Prevenga el estreñimiento.

  • Use un laxante o un ablandador fecal según le indique su proveedor.

  • Coma más alimentos que contengan fibra.

• Termine todos los antibióticos que le haya recetado el proveedor.

• Una vez que le quiten la sonda, es normal que tenga algo de sangre en la orina y un poco de ardor al orinar.

Visitas de control

Programe una visita de control o según le indique el proveedor de atención médica.

Cuándo debe llamar a su proveedor de atención médica

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si tiene cualquiera de los siguientes síntomas:

• Sangrado abundante o coágulos de sangre grandes en la orina

• Sangre en la orina después de 3 días

• La sonda se sale o deja de drenar

• Fiebre de 100,4 °F ( 38 ° C) o más, o según le indique el proveedor

• Escalofríos con temblores

• Dificultad para orinar

• Dolor o cólicos abdominales que no desaparecen