Trabajo de parto prematuro

El trabajo de parto prematuro significa el trabajo de parto antes de la semana 37 de embarazo. Puede ocurrir en cualquier momento entre las 20 y 36 semanas de embarazo y puede hacer que los bebés nazcan demasiado pronto. Los bebés pueden tener problemas de salud. Es más probable que una mujer que está embarazada de más de un bebé tenga trabajo de parto prematuro. Conozca los signos del trabajo de parto prematuro. Cuando se descubre a tiempo, el trabajo de parto prematuro puede manejarse e incluso a veces detenerse.

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si tiene alguno de estos síntomas antes de la semana 37 de embarazo:

• Contracciones fuertes

• Contracciones que ocurren cada 10 minutos o con mayor frecuencia

• Calambres menstruales constantes

• Calambres abdominales con o sin diarrea

• Dolor lumbar repentino o constante

• Secreción vaginal con mucosidad o sangre

• Sangrado o manchado en el segundo o tercer trimestre

Preeclampsia

La preeclampsia es una afección que incluye presión arterial alta (hipertensión), hinchazón y signos de problemas en los órganos. Puede ser más probable en un embarazo múltiple. Puede aparecer alrededor de la semana 20 del embarazo. A menudo desaparece a las 12 semanas después de dar a luz. Puede provocar riesgos graves para su salud y la salud de su bebé. Durante su embarazo, su proveedor de atención médica le controlará la presión arterial.

La preeclampsia también puede causar estos problemas de salud:

• Convulsiones

• Insuficiencia renal

• Daño hepático

• Sangrado en el cerebro que provoca un accidente cerebrovascular

• Líquido en los pulmones

• Problemas de coagulación de la sangre

Esta afección también es peligrosa para los bebés. Evita que la placenta les lleve suficiente sangre. No pueden obtener suficiente oxígeno y nutrientes. Como resultado, los bebés pueden nacer demasiado pequeños (peso bajo al nacer). Pueden tener otros problemas de salud.

El tratamiento depende de cuán grave sea la afección. En todos los casos, usted y su bebé serán controlados de cerca. En algunos casos, es posible que necesite reposo en cama. Y en un caso grave, es posible que deba ir al hospital para recibir tratamiento o dar a luz.

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato ante cualquiera de estas situaciones:

• Hinchazón en el rostro o las manos

• Aumento de peso rápido

• Poco o nada de orina

• Sangre en la orina

• Dolor de cabeza intenso

• Dolor en el vientre (abdominal) del lado derecho

• Problemas de la visión (escamas o manchas o visión borrosa)

• Náuseas, vómitos o ambos

• Sensación de que los movimientos de los bebés se han ralentizado

• Sensación de que los bebés no se mueven

Diabetes gestacional

Se diagnostica por primera vez durante el embarazo. Los cambios hormonales en el cuerpo hacen que el azúcar en sangre sea demasiado alta. Esto puede ser un problema en cualquier embarazo. Pero existe un mayor riesgo en un embarazo múltiple. Los niveles altos de azúcar en sangre hacen que la preeclampsia sea más probable. Los niveles altos de azúcar en sangre también pueden hacer que los bebés crezcan demasiado. Esto puede causar problemas en las últimas etapas del embarazo y durante el nacimiento.

Los bebés nacidos de padres con diabetes gestacional pueden tener problemas después del nacimiento. Estos incluyen problemas respiratorios y niveles bajos de azúcar en sangre. Controlar el azúcar en sangre puede ayudar a prevenir estos problemas. Si tiene esta afección, es posible que deba consultar a especialistas en diabetes. Estos incluyen un proveedor de atención médica y un nutricionista. Ellos analizarán los tratamientos con usted. Esto incluye comer y realizar actividades físicas para controlar su azúcar en sangre. También puede necesitar medicamentos.

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato ante cualquiera de estas situaciones:

• Todo el tiempo tiene sed.

• Orina con frecuencia y en grandes cantidades cada vez.

• Se siente cansado todo el tiempo.

• Tiene infecciones vaginales por hongos que siguen reapareciendo.

Problemas de la placenta

La placenta proporciona nutrición a los bebés. También elimina los desechos. En un embarazo múltiple, más de un bebé puede compartir la misma placenta. O cada bebé puede tener su propia placenta. Los problemas más comunes son el desprendimiento de placenta y la placenta previa. El desprendimiento de placenta se produce cuando la placenta comienza a desprenderse del útero antes del parto. Esto puede privar al bebé del suministro de oxígeno y nutrientes. El desprendimiento de placenta puede causar sangrado vaginal abundante, aunque puede no haber ningún sangrado. Otros síntomas pueden incluir dolor abdominal o de espalda y contracciones uterinas.  

Otro problema de placenta frecuente en embarazos múltiples se denomina placenta previa. Es una afección en la que la placenta cubre total o parcialmente la abertura del útero (cuello uterino). La placenta previa puede provocar sangrado vaginal o manchado que a menudo es indoloro.

En casos leves, el proveedor de atención médica los observará a usted y a sus bebés. En casos más graves, los bebés pueden nacer de inmediato por cesárea. Si tiene placenta previa, no tenga relaciones sexuales ni permita que nadie, excepto su proveedor de atención médica, verifique si su cuello uterino está abierto. Esto podría causar sangrado.

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato ante cualquiera de estas situaciones:

• Sangrado de la vagina

• Dolor o calambres abdominales

• Dolor lumbar

• Reducción de los movimientos fetales

Anemia por deficiencia de hierro

El cuerpo usa hierro para producir glóbulos rojos para usted y sus bebés. Estas células transportan oxígeno. La anemia se produce cuando el recuento de glóbulos rojos del cuerpo es demasiado bajo. En las mujeres embarazadas, a menudo esto es causado por una cantidad insuficiente de hierro en la sangre. También se la conoce como anemia por deficiencia de hierro. Esta afección es frecuente en un embarazo múltiple. Si no se trata la anemia por deficiencia de hierro, es posible que nazcan bebés muy pequeños. Los bebés pueden tener otros problemas de salud. Este problema se puede detectar con un análisis de sangre de rutina llamado hemograma completo (complete blood count, CBC). Esta prueba se realiza a todas las mujeres embarazadas. Se realiza en una de las primeras visitas prenatales. A todas las mujeres embarazadas se les repite el análisis de sangre a las 28 semanas. Si tiene anemia, siga los consejos de su proveedor de atención médica para tratarla. Es posible que deba ingerir alimentos con alto contenido de hierro y tomar suplementos de hierro.

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato ante cualquiera de estas situaciones:

• Sensación de cansancio todo el tiempo

• Mareos

• Piel pálida

• Falta de aire

• Ritmo cardíaco acelerado

Restricción del crecimiento fetal (fetal growth restriction, FGR)

La FGR significa que un bebé no está creciendo a una velocidad normal dentro del útero. El bebé es más pequeño de lo normal. Existen diferentes causas para la FGR. Estas incluyen preeclampsia, placenta compartida y trastornos genéticos. En un embarazo múltiple, la FGR es bastante frecuente. Un bebé o todos los bebés pueden verse afectados. Un bebé con FGR puede tener problemas de salud. Estos incluyen niveles bajos de azúcar en sangre y falta de oxígeno suficiente al nacer. Es posible que tengan problemas para combatir infecciones o mantener una temperatura corporal normal después del nacimiento. No sentirá ningún síntoma de la FGR. Sin embargo, puede tomar medidas para ayudar a evitar que esto afecte a sus bebés, por ejemplo:

• Coma suficientes alimentos según lo indique su proveedor de atención médica.

• No fume ni beba alcohol.

• Descanse lo suficiente. Pregunte a su proveedor qué actividades puede hacer de manera segura.

• Tome los suplementos y medicamentos según las indicaciones de su proveedor de atención médica.

• Vaya a controles prenatales regulares.